No se cuándo podré volver a pintar. Espero que algún día no muy lejano me sea posible. Mientras tanto, para no dejar morir este blog que con tanta ilusión comencé, seguiré mostrando en él algunas de las obras realizadas en otro tiempo que por una u otra razón, me gustaron o satisficieron personalmente y conservo por ahí. Este cuadro es de hace unos pocos años. Lo pinté inspirándome en nuestra perrita que nos adoraba y a la que adorábamos pero que ya no está con nosotros. Es una tabla de 60 x 40cm y está pintado con acrílicos utilizando diferentes técnicas ya explicadas en otras entradas (raspados, frotados, aguadas...)